Todo el mundo conoce las Bao Ding o esferas chinas, pero casi nadie sabe para qué se usan. En primer lugar debemos decir que en China se las utiliza desde hace miles de años para conseguir la armonía energética.
Como se aprecia a simple vista, se trata de dos bolas de acero liviano esmaltadas e impresas con figuras míticas, como lo son el ave Fénix y el Dragón, entre otras. Además, al moverlas se genera un sonido suave, diferente en cada una de ellas, uno corresponde a Yin (femenino) y el otro a Yang (masculino), esta melodía aporta una gran relajación y concentración.
La terapia del Jian (fuerza) Sheng (salud) Qiu (pelota)
Con ellas es posible realiza reflexología en las manos de una manera sencilla y entretenida. Recordemos que en las palmas se encuenatra representado el mapa de todos los órganos de nuestro cuerpo y una serie de puntos energéticos que conectan con ellos. Al ser estimulados se equilibra la energía interna, mejorando así la salud general del cuerpo.
Por otra parte, las yemas de los diez dedos de la mano tienen contacto directo con el corazón y, al ponerlos en movimiento, estaremos estimulándolo a que funcione mejor.
Cada mano tiene una función energética diferente, la izquierda corresponde a Yang y se relaciona con la energía vital; la derecha corresponde a Yin y se relaciona con la sangre, por eso las esferas deben usarse primero en una mano y luego en otra.
Así se usan
El movimiento tiene que ser en el sentido de las agujas del reloj aunque, una vez que se domine esta técnica, también puede girarse en sentido contrario. El movimiento tiene que ser suave y constante.
Los practicantes de Tai Chi suelen usar las esferas chinas para meditar y, también, unas similares, de hierro pesado, para desarrollar mayor fuerza en las manos.
Es un ejercicio ideal para hacer en todas las etapas de la vida y prevenir las enfermedades de los huesos y entumecimiento de las articulaciones. También mejora notablemente el síndrome del túnel carpiano, muy común por el uso de computadoras.
