
El Maestro Liu Ming, fundador de la escuela de artes marciales internas “Escuela Tai-Chi Wu-Chi” es oriundo de Nanjing, China. Proviene de una familia de destacados artistas y médicos. Se desempeñó como monje taoísta, perteneciente a la 28º generación de Quan Zhen. Ejerció como maestro de I Ching en el templo taoísta Yu Huang Guan. Asimismo, es médico de Medicina Tradicional China Taoísta y maestro de Kung Fu interno (Tai Chi Chuan, Xing-Yi, I-Chuan, Pa Kua). Fue campeón mundial y de China de Tai Chi Chuan en “forma” y “espada”.
En la exhibición realizada en el festival de Año Nuevo Chino presentó una forma de Tai Chi llamada Tian Di, Cielo y Tierra. La misma busca la armonía y la unión de las personas, empezando por el desarrollo interno y luego tomando contacto con todas las relaciones externas.
El profesor Matias Frizzo, realizó dentro del estilo de Tai Chi una forma de sable.
El sable permite avanzar en conceptos como el recorrido espiral de la potencia para expresarla de forma explosiva. Si se practica con relajación y la intención adecuada, el cuerpo se mueve como una sola unidad dirigiéndose al lugar adecuado. El sable es un arma pesada que hay que manejar con la ferocidad de un tigre. Su empleo ayuda a desarrollar la energía e implica fluir con el arma, con su inercia hasta lograr fundirse y convertirse en uno con ella.
– La profesora Cristina Yi Pei Jeng realizó una forma de Tai Chi Chuan con abanico. La técnica de abanico combina elasticidad y precisión de movimiento, partiendo de la fuerza de enraizamiento generada con la práctica de Tai Chi. Esta es una forma de ejercicio interno que nos ayuda a conectar la mente, el cuerpo y el espíritu. Conserva la sabiduría milenaria de la filosofía, la medicina y el arte oriental para cuidar la salud y alimentar la vida.
– El profesor Hugo Silvero presentó una forma de Tai Chi, que implica ejercicios con los cuales se busca desarrollar una mente clara, un cuerpo sano, flexible y fuerte que nos ayuda a mejorar la respiración, la salud y tener más energía para la vida cotidiana.
El Maestro Liu Ming finalizó la presentación realizando una forma de Tai Chi con espada. La armonía demostrada en esta forma lo llevó a ser campeón mundial profesional en esta disciplina. El Maestro cuenta ya con más de veinte años de experiencia enseñando distintas formas de Kung Fu, Chi Kung y Tai Chi. Numerosísimos alumnos han pasado por sus cursos, tanto en China como en Argentina. La excelencia de su enseñanza ya empieza a verse reflejada en sus alumnos argentinos, que se han destacado en competencias a nivel nacional, sudamericano e incluso mundial. Él está convencido de que tiene algo muy valioso para compartir y, con humildad y perseverancia, confía en poder hacerlo.






