El batik es un arte de estampa textil que en occidente popularizaron los hippies de la década del 60, sin embargo en China es un arte que lleva miles de años. La etnia Miao, una de las 56 que conforman la población China, quienes habitan en la provincia de Yunnan, fue la primera en emplear esta técnica para diseñar los géneros con los que confeccionaban su ropa.
El procedimiento difiere de aquel que se lleva a cabo en este lado del mundo; los Miao realizaban hermosos dibujos con cera sobre las telas, una vez seca la sumergían en colorante índigo para teñirlas y luego le retiraban la cera. De esta manera quedaban las estampas blancas sobre el fondo azul o a la inversa. Además, como la cera se agrieta al entrar en contacto con el líquido se sumaba un plus en el diseño.
Los temas preferidos a la hora de dibujar eran los ríos, montañas, pavos reales, elefantes, flores, dragones y todo aquello que representase a su cultura étnica. Lógicamente, el trabajo era cien por ciento artesanal, pero despues de la fundación de la República Popular China, la metodología cambió. El gobierno estableció fábricas exclusivas para la producción de batik, en las cuales se cuenta con tecnología que acelera los procesos pero siempre respetando el arte tradicional. De esta forma el diseño y los colores se ampliaron enormemente y el arte de batik se extendió a los almohadones, cortinas, manteles y todo aquello que se pueda confeccionar en tela.
