Los gigantescos puentes de cristal son una tendencia en los últimos años en China. Apenas el año pasado se habilitó uno de características similares que mide 430 metros de largo y 6 metros de ancho en el Gran Cañón en Zhangjiajie, provincia de Hunan.
Dentro de unos días, exactamente el 24 de diciembre, cuando la mayoría de los occidentales y un porcentaje pequeño de orientales nos preparamos para festejar la nochebuena, en Shijiazhuang, provincia de Hebei, se abrirá la pasarela de cristal más imponente y grande de China.
Los más osados podrán recorrer 488 metros a una altura de 218 metros (equivalente a un edificio de 66 pisos), sobre 1077 paneles de vidrio transparente de 4 centímetros de espesor. Pero se necesita mucho valor para hacerlo, ya que los ingenieros, para darle mayor emoción al paseo, lo diseñaron para que tenga un sutil movimiento en su parte central. El puente fue construido para soportar el peso de hasta 2.000 personas, aunque se recomienda que no suban más de 500 al mismo tiempo.
Pero el susto bien vale la pena, ya que desde este punto se podrá disfrutar de Hongyagu, un paisaje increíble que cuenta con montañas, cascadas naturales, pueblos tradicionales y templos antiguos.
Un paseo por allí, seguramente será la manera en que miles de chinos festejarán la Navidad.
