El Teatro de Sombras es una de las artes más representativas de China y cuenta con más de 2000 años de historia, por lo cual ha sido distinguido como Patrimonio cultural inmaterial de la Humanidad.
Si bien no se sabe a ciencia cierta su origen, una de las versiones más difundidas las remonta a la Dinastía Han, cuando el emperador Wudi, quien gobernara entre los años 141 y 87 antes de Cristo, destrozado por la muerte de Wang, una de sus concubinas, convocó a sus oficiales para intentar revivirla.
Los hombres crearon una silueta de cuero que se asemejaba a ella y fue puesta en movimiento –con la ayuda de varillas de madera- detrás de una tela, bajo la sombra que proyectaba una lámpara de aceite. Cuando el emperador se percató del engaño se molestó muchísimo, pero luego se dio cuenta que era una forma de volverla a ver, aunque fuese una ilusión. A partir de ese momento, en forma periódica se montaban pequeñas obras para calmar la tristeza del emperador. Poco a poco este pequeño espectáculo se hizo conocido, extendiéndose por diversas regiones de China y otros territorios de Asia, convirtiéndose así en una nueva forma de arte escenográfico.
Con el tiempo, cada pueblo le dio su propio estilo a las figuras, la forma de manipularlas, la iluminación y las historias.
Actualmente, el Teatro de Sombras sigue vigente e incluso existen más de 200 escuelas que enseña este arte milenario y tan significativo.
